Thursday, March 26, 2009

EL FALSO SENTIMIENTO DEL "YO"


“¿Cómo podría existir en nosotros el real sentimiento de nuestro verdadero SER, cuando esos YOES están sintiendo por nosotros y pensando por nosotros?”. “Lo más grave de toda esta

tragedia es que uno piensa que está pensando, siente que está sintiendo, cuando en realidad es otro el que en un momento dado piensa con nuestro martirizado cerebro y siente con nuestro adolorido corazón”. Vale la pena que reflexionemos sobre esta cuestión del sentimiento de sí mismos, conviene que entendamos a fondo la cuestión del falso sentimiento del “Yo”. Todos aquí, en el fondo de nuestro corazón, tenemos siempre el sentimiento de sí mismos, más conviene saber si este sentimiento es correcto o equivocado; es necesario, pues, entender lo que es este sentimiento del “Yo”.

Ante todo urge entender que las gentes estarían dispuestas a abandonar el alcohol, el cine, el cigarrillo, las pachangas, etc., menos sus propios sufrimientos. La gente adora sus propios dolores, sus sufrimientos; se despegarían más fácilmente de un rato de alegría que de sus propios sufrimientos. Sin embargo, parece paradójico que todos se pronuncien contra los mismísimos sufrimientos, que se quejen de sus dolores, más cuando en verdad hay que abandonarlos, en modo alguno estarían dispuestos a semejante renunciación.

Ciertamente, tenemos una serie de fotografías vivientes de sí mismos: fotografías de cuando teníamos 18 años, fotografías de cuando éramos muchachos, fotografías de cuando éramos hombres de 21 años, fotografías de cuando teníamos 28 o 30 años, etc., etc., etc. A cada una de esas fotografías psicológicas le corresponde toda una serie de sufrimientos, eso es ostensible, y gozamos examinando tales fotografías, nos deleitamos en narrar a los demás los sufrimientos de cada edad, las dolorosas épocas por las que pasamos, etc. Hay un gusto exótico, bohemio dijéramos, cuando narramos a otros nuestros dolores, cuando les decimos que somos gentes de experiencia, cuando les contamos las aventuras de muchachos, la forma como tuvimos que trabajar para ganarnos el pan de cada día: la época más dolorosa de la existencia, cuando andábamos por allí buscando los centavos para subsistir (¡cuántos dolores, cuántos sufrimientos!; con todo eso gozamos). Cuando estamos haciendo ese tipo de narraciones, somos verdaderamente bohemios entusiastas; en vez de deleitarnos en este caso con el alcohol, con el cigarro, nos deleitamos con la historieta, con la novela, con lo que dijimos, con lo que nos pasó, con lo que nos dijeron, con la forma en que vivimos, etc., etc., etc. Es una especie de bohemia bastante exótica que nos gusta; en modo alguno parece que estamos dispuestos a abandonar nuestros propios sufrimientos. Ellos son, pues, el narcótico que a todos nos gusta, el deleite que a todos nos agrada, y mientras más accidentada una vida, parece que nos sentimos más exóticos, más bohemios (cosa absurda, por cierto).

Pero observen ustedes que a cada situación corresponde un sentimiento, un sentimiento del “Yo”, del “mí mismo”: sentimos que somos, sentimos que existimos... En estos momentos están ustedes sentados aquí, escuchándome, y yo estoy hablándoles; ustedes sienten que sienten, tienen aquí, en el corazón, el sentimiento de sí mismos. ¿Y están seguros de que ese sentimiento es correcto? ¡Posiblemente que sí están seguros de eso! El caso es ese sentimiento que en este momento tienen: el sentimiento de existir, el sentimiento de ser y de vivir, ¿será el verdadero, será un falso sentimiento? Conviene que seamos un poquito reflexivos en estas cuestiones...

Cuando andábamos por allí, tal vez en las cantinas, o cuando deambulábamos por los cabarets, ¿tendríamos sentimiento? ¡Sí, es obvio que lo teníamos! ¿Y ese sería el correcto? A cada edad corresponde un sentimiento, porque uno es el sentimiento cuando se tienen 18 años y otro cuando se tienen 25; otro es el sentimiento de los 30, y otro el de los 35, y un anciano, indudablemente, tendrá su propio sentimiento. ¿Cuál de éllos será el correcto? Es algo tremendo esta cuestión del sentimiento de sí mismos, pues uno siente que siente, uno siente que existe, uno siente que vive, uno siente que es, uno siente que tiene corazón, y dice: “Yo”, “Yo” y “Yo”, porque son muchos los “Yoes”... ¿Cuál de éllos sería pues el exacto? Reflexionen ustedes un poco en esta cuestión; piensen que vale la pena tratar de comprender esta cuestión...

Si uno desintegra un “Yo” cualquiera, tengamos el del resentimiento con alguien, está contento de haberlo desintegrado; pero si el mismísimo sentimiento continúa, hay algo que está fallando en el Trabajo. Sencillamente, ésto nos indica que tal “Yo” que creíamos haber desintegrado, no se ha desintegrado, puesto que el sentimiento del mismo continúa... Si perdonamos a alguien, y más aún: si CANCELAMOS el dolor que ese alguien nos ha producido, y continuamos allá con un sentimiento igual, ésto nos está indicando que no hemos CANCELADO ese agravio, o ese mal recuerdo, o esa mala acción que alguien nos produjo; el “Yo” del resentimiento continúa vivo... Estamos tocando un punto muy delicado, puesto que todos estamos en el Trabajo de sí mismos, y sobre sí mismos... Cuantas veces hemos creído, por ejemplo, que hemos desintegrado un “Yo” de venganza, pero el sentimiento aquél que teníamos continúa; ésto indica, entonces, que no logramos desintegrar tal “Yo”, ¡eso es obvio!.

De manera que en nosotros existen sentimientos como “agregados psíquicos” o “Yoes” tenemos en nuestro interior. Si tenemos 10,000 “agregados psíquicos”, indudablemente tendremos 10,000 sentimientos de sí mismos; a cada “Yo” tiene su propio sentimiento. Así, pues, una pauta a seguir en nuestro Trabajo sobre sí mismos, es esta cuestión del sentimiento... Intelectualmente podremos haber aniquilado el “Yo” del egoísmo, ¿pero continuará acaso existiendo ese sentimiento de “primero Yo”, “segundo Yo” y “tercero Yo”? Seamos sinceros consigo mismos, y si continúa existiendo tal sentimiento, es porque el “Yo” del egoísmo aún existe. Así, pues, hoy los he invitado a ustedes a comprender esta cuestión del sentimiento...

Cuesta mucho trabajo que las gentes se resuelvan a entender la necesidad de desintegrar el Ego, pero más trabajo cuesta que entiendan lo que es el sentimiento, que suele ser tan fino, se escapa, es tan sutil... En todo caso, en el Trabajo sobre sí mismos, mis queridos amigos, hay tres líneas que debemos entender:

PRIMERA, el Trabajo sobre sí mismos, con el propósito de desintegrar los “agregados psíquicos” que en nuestro interior tenemos, viva personificación de nuestros errores. SEGUNDA, el Trabajo con los demás (debemos aprender a relacionarnos con los demás), y TERCERA, el Amor al Trabajo, el Trabajo por el Trabajo mismo.


Si deseas interiorizar profundamente en este y otros temas realcionados te invitamos cordialmente a sintonizar nuestra estación de radio:




"La radio al servicio de la Humanidad"


1 comment:

  1. Slots: Play Real Money Video Slot Games and - DrmCD
    › games › slot › 동해 출장마사지 games 안동 출장마사지서울특별 출장마사지 slot › 세종특별자치 출장마사지 games › slot Play Free Slots · Wild 라이브 스코어 사이트 Wild West · Starburst · Gonzo's Quest 2 · Super Hot Vegas 2 · Gonzo's Quest 2 · Thunderpick · Starburst II.

    ReplyDelete